Odio al Amor


Hace mucho tiempo que quiero decir algo; “ODIO PROFUNDAMENTE EL AMOR” no hay cosa más espantosa en este mundo que el amor. Cuando es correspondido siempre tiene complicaciones Y cuando no; es un pandemonio. Miles de veces me pregunto ¿Por qué mierda tenemos esa puta costumbre de enamorarnos? Qué nos hace pensar que esa persona nos va a complementar y va a ser para el resto de la vida? La mayoría de las personas sufrimos por amor. Y esto, es lo que me molesta de sobre manera. ¿Por qué nos tenemos que enamorar? ¿Qué es lo que fisiológicamente nos obliga, a hacer semejante idiotez?
A nadie le gusta estar con el puto teléfono al lado esperando que llegue un mensaje o una llamada, qué le hagan una escena de celos porque miró a alguien por la calle, ir a reuniones familiares que no son las suyas (ni siquiera esta bueno ir a las de uno, mucho menos ir con gente a la cual no te une nada y no son tus amigos), no está bueno que te digan que salís mucho o que te quieran hacer cambiar cosas que hiciste toda tu vida así, no es divertido tener que ir a ver al cine una película que no queres ver, no tenes ganas de salir con una “pareja amiga” (vos ya tenes tus amigos, los cuales se enojaron porque saliste con esos boludos y no con ellos), si no vas a ver a tu abuela ¿por qué tenes que ir a ver a una, que no es la tuya y que ni siquiera te daba plata de chico?
El amor es una mierda porque es una sensación que no podemos controlar. De vez en cuando nos terminamos enganchando con especímenes espantosos, con los cuales ni siquiera aguantaríamos un viaje de larga distancia. Nos enamoramos y sufrimos porque el amor es duro y sobre todo; cuando empieza y termina. Cuando empieza por las fuckings dudas que todos tenemos: ¿la llamo? ¿no querrá atenderme? ¿Quién es este flaco que esta abrazándola en esa foto? ¿Querrá lo mismo que yo? Y miles de huevadas más que no tienen ningún tipo de importancia, porque la realidad es que en algún momento te vas a separar. Te va a dejar de encantar que siempre use colores locos y vas a empezar a querer que se vista como gente normal, te va a dejar de causar ternura la relación que tiene con la madre o te va a dejar de parecer adorable que sea tan inteligente, dado que pasa las 48 horas del fin de semana estudiando.
El amor es pasajero y sólo tiene un punto en el que se pone bueno; el principio. Creo que si hay algo de lo que no me arrepiento de los noviazgos que tuve fue de los primeros meses, cuando todo es lindo. Cuando las cosas qué en breve te van a empezar a fastidiar, todavía te encantan. El amor es lindo cuando no hay complicaciones y tendría que ser así toda la vida, pero no. Siempre se llega a un punto sin retorno; La primer pelea, esa en donde vez la otra cara de la situación, es ahí que te das cuenta qué esa boca que antes te parecía maravillosa puede ser una máquina infernal de decir boludeces y es en ese momento y no en otro es cuando todo se empieza a complicar. Se van a amigar enseguida y todo va a volver a ser como antes. O eso quieren creer.
Desde ese día en que pelearon por primera vez los dos se empiezan a ver con otros ojos, ya no son la parejita perfecta de los cuentos para chicos, ahora pasaron a tener el status de una pareja normal. El balance que hacías antes, ahora cambio. Ahora ya no te gusta tanto eso q antes era insignificante o hasta agradable. Cada día que pasa esas actitudes te empieza a hinchar las pelotas, y como si fuera un globo cada día se va llenando mas y mas y ¿adivinen qué?, ese globo un día estalla y ahí es cuando empieza la segunda pelea.
Ya tenias un precedente, pero por la emoción del enamoramiento no la recordabas con claridad. Ahora volves a ver que en ese frasco lleno de ternura hay una bestia salvaje que quiere comerte crudo en ese momento. Pero como en la primera pelea, todo se resuelve. Se prometen que van a ser más fuertes y que se van a amar tanto y más que antes. Pero ahora en vez de un globo hay cientos y cada día se inflan más, con un solo propósito; reventar.
Después de muchas peleas, idas y vueltas uno toma la decisión, esa tan difícil pero efectiva, “No quiero estar más con este engendro mutante o bruja controladora” así que por un lado, uno de los dos sigue pensando que está todo bien, pero eso no es así. Uno piensa en rosa y el otro en un negro opaco, pero bien opaco. Es entonces cuando rompen, una parte llora, patalea y hasta puede amenazar con matarse. Pero la realidad es que al tiempo ya va a estar mejor, pero eso sí; con un resentimiento infernal. Por otro lado mientras que algunos mastican odio como si fuera un Beldent, él que dejó siente una mezcla de paz y nostalgia que puede ser comparada sólo con el orgasmo, la pasaste bien, te dan ganas de volver a hacerlo, pero en ese momento no queres que nadie te toque ni te mire –multiorgasmicas consulten-.
Entonces estas vos satisfecho totalmente de amor, disfrutando plenamente de tu vida, pero saliste un día q no tenias que salir y te volviste a enamorar, y no es porque sos un enfermito/a que le gusta sufrir sino porque inexplicablemente tenes ganas de conocer a una familia q no es la tuya, ir a ver pelis que no te gustan y lo más importante del mundo pasarla mal, MUY MAL.

El tamaño de mi pito lo es todo

Cada vez que me levanto el tamaño de mi miembro cambia, con esto no quiere decir que soy el hombre de goma, sino hablo de una cuestión personal, aunque me gustaría decir académica pero sólo por cómo suena la palabra, cada mañana lo veo diferente porque cada mañana soy diferente yo, el tamaño de miembro no cambia solo o mejor dicho si lo puede hacer pero no estoy hablando de esas situaciones. Sino de los momentos en los que sin motivo alguno nosotros lo vemos diferente, nos sentimos increíbles, que podemos tener el mundo en nuestras manos. O que somos una porquería y pensamos que vamos a fracasar.
Todo esto es parte de nuestra vida, no podemos estar bien todos los días y no podemos estar mal todos los días. Hay gente que sí lo está pero donde está lo sano en eso, porque cuando estamos bien aprendemos a donde queremos ir y cuando estamos mal comprendemos que es lo que no tenemos que hacer, por eso es que me gusta tanto triunfar y fracasar, porque aprendo y sé que si soy inteligente la próxima voy a poder lograr el objetivo
¿Pero entonces que tiene que ver el tamaño de nuestro “amigo”, con nuestras victorias? y la respuesta por lo menos para mí es TODO, cuando nos predisponemos a ser gigantes podemos hacer todo lo que queramos en cambio cuando pensamos en pequeño solo ideas de ese tamaño pueden venir y fracasemos o triunfemos cuando nos sentimos bien vamos a poder valorar la experiencia. Para ser más claro el pene es como la gordura en las mujeres dependiendo de cómo estén o como se sienten se van a ver más o menos flacas. Por eso mi más profundo deseo es que ellas vivan viéndose flacas y nosotros teniéndola gigante.

TENACIOUS D