La tiranía de los "no"

El “no” es una palabra a la que le damos más connotaciones de las que tiene, por lo general asociamos un “no” a algo negativo, algo que destruye los proyectos y que nos hace pensar que todo esta perdido. Pero ¿cuál es el verdadero sentido del no? ¿Realmente es una palabra tan terrible de escuchar?, o en el fondo esconde algo interesante. Si hay algo que quiero remarcar es que “no” en muchos casos tiene tanta fuerza como “si”, porque al contrario de lo que pensamos el “no” tiene empuje. Un “si” es la respuesta fácil y obvia, pero un “no” quiere decir que vamos a tener que esforzarnos para conseguir lo que buscamos. Quiere decir que nos vamos a tener que movilizar y luchar, que no vamos a tener todo servido en bandeja. Y eso es justamente lo que hace que el “no” llegue a tener más fuerza que el “si”. Hay que plantear la lucha del “si” y el “no” como una lucha épica, el Yin y el Yang, el bien y el mal. Por que nuestra vida estuvo, está y estará siempre compuesta por estas palabras. El tema es no rendirse, no bajar los brazos y no dejar que ninguno de los dos predomine sobre el otro, no dejar que las cosas se nos hagan demasiado fáciles ni demasiado difíciles. Porque en lo malo también se encuentra lo bueno. En la vida, nos cruzaremos miles de veces con gente que nos dice; que no servimos para algo determinado, o no estamos calificados. Es por eso que tenemos que escuchar a nuestra conciencia, pensar que lo que nos dicen no es más que una simple opinión y por más importante que sea, no deja de ser tal. A Abraham Lincoln el pueblo americano le dijo 7 veces que no, antes de ser electo presidente, Charles Chaplin salio segundo en un concurso de imitadores de Charles Chaplin, Mohamed Ali era demasiado gordo, los Beatles nunca venderían un disco y millones de historias mas que no conocemos. Imaginen lo que hubiese perdido el mundo si esos “no” de gente calificada, hubiesen sido escuchados. Que pasaría si nos rendimos y no peleáramos ante la tiranía de los “no”, muchos conformistas dirán que el mundo seria mas tranquilo si estos no existieran, que seria el edén prometido por la Biblia. Yo pienso que el mundo sin ese terrible y aterrador “no” sería un infierno, el “no” es motivación, es romper las reglas e ir mas allá de lo establecido, es una transgresión sana, es superarse y decir que uno es quien elige su futuro, que no tiene un destino hecho, sino que lo va conformando a cada paso. Por eso cuando salgamos a desempeñarnos en lo que hacemos no nos rindamos, luchemos por conseguir lo que queremos, por que todo es posible. Todo se puede hacer con esfuerzo y todo se puede conseguir si estamos dispuestos a luchar por lo que queremos. ¿O no?.